Motivar consiste en:
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Elevar la predisposición de los empleados para luchar por las metas.
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Dar lo mejor de sí mismo.
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Exigir recompensando. Nadie trabaja por amor al arte. Detrás del esfuerzo hay una expectativa de conseguir algo (dinero, reconocimiento, realización profesional, formación, etc.).
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Utilizar diversos mecanismos de motivación según la situación.
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Confiar, dar responsabilidades.
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Demostrar interés por la persona.
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Mostrar cariño
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Apasionar al equipo
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Crear una actitud positiva ante el trabajo.
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Crear ilusión...
¿Por qué le cuesta tanto manejar adecuadamente la motivación?
Principalmente la razón la podemos hallar en que muy pocos jefes, gerentes están motivados. Si partimos de este razonamiento hay que plantearse la pregunta de cómo entonces voy a poder motivar a alguien. A ello hay que añadir que éste no se detiene a evaluar cómo puede motivar en pro de cumplir con todas aquellas metas, objetivos que se han propuesto alcanzar.
Es muy común oír decir en las organizaciones: "hay que motivar a nuestro personal para que trabajen más y produzcan mejor". Piensan que es una barita mágica, unos polvos que al echarlos todo cambio, el clima laborar, la predisposición de los músicos, la actitud. Señores, tengo que deciros que no es así. La motivación es un trabajo que requiere tiempo y dedicación. El problema radica en que en las empresas el tiempo es lo que más hace falta por lo que no podemos perder "tiempo" en averiguar cómo motivar a los demás. Muchos directivos acaban con el problema diciendo que eso es una cuestión personal, que allá con cada cual, ahí están para hacer su trabajo y ya está. Esta actitud es la que hace que la gente termine por dejar el trabajo o en ocasiones por perder una gran calidad de vida tanto personal como labor, recayendo todo ello en los resultados y en el ambiente de la organización.
¿Sabemos motivar? ¿Cuál debe ser nuestra actitud?
El buen líder sabe que la motivación es la clave del éxito en todos los ámbitos de la vida. Por ello se interesa en conocer qué motiva a la gente y cuando lo averigua se pone manos a la obra. Es su deber, como una de las tantas funciones que tiene, motivar a los componentes de la orquesta. La mayoría de personas trabajan por necesidad, dinero, aunque hay otras causas, él las busca y las localiza.
El gran líder no da siempre la misma motivación porque si fuera así, ésta desaparecería. Muchas personas consideran más importante, una vez cubiertas sus necesidades económicas básicas, su desarrollo profesional, el sentirse valorado, el considerarse parte del grupo, el trabajar en un ambiente agradable, el disponer de autonomía, el poder tomar decisiones. Resulta tremendamente motivador dar a los empleados la oportunidad de liberar todo su talento, reconociendo el trabajo del grupo y recompensándole de forma justa, identificando las fortalezas del conjunto, generando confianza y una norma de trabajo, alentando y apoyando las decisiones del equipo, ofreciendo un trabajo que represente un desafío y los motive, reconociendo las necesidades individuales y de grupo y atenderlas de manera oportuna, de esta manera consolidar las capacidades del conjunto para que se anticipe y enfrente a los cambios, todo ellos formándoles y apasionándoles por lo que hacen y donde lo hacen.
Como líder tu actitud debe ser positiva, siendo en todo momento realista. Si estás motivado será mucho más fácil crear un clima laboral óptimo. Sí tú disfrutas, si te apasiona tu trabajo, si vas con una sonrisa sincera, si estás alegre, si eres divertido, si propicias la comunicación, si fijas metas difíciles pero alcanzables, si das autonomía y libertad y flexibilidad, si muestras interés por todos ellos, si respetas, si das confianza, si eres leal, justo y coherente, si premias los logros, la creatividad, el esfuerzo, la innovación, la dedicación, si eres paciente, si escuchas, si propicias una comunicación fluida y una política de puertas abiertas, los resultados...el entusiasmo estará garantizado y por tanto los resultados serán inmejorables. Con una alta motivación la empresa producirá más y las personas disfrutarán de su trabajo.
13. Algo más sobre el tema
Como la vida misma, el líder también se encuentra con ciertas dificultades en el camino. Si tu nivel de autoestima no es el adecuado puedes caer en un endosiamiento. Si alcances este estado se producirá en ti un cambio importante, predominará el distanciamiento, la prepotencia, el avasallamiento, la intolerancia, la falta de respeto, el creer ser superior. Todo ello va deteriorando el clima laboral, alejándote de la realidad, perdiendo contacto de la información y con los que un día fueron tus seguidores. De esta forma tu posicionamiento cae, así que ahora pasará de ser el líder a un jefe más, convirtiéndote en el antilíder (Soberbio, Incumplidor, Temeroso, Apagado, Huye el riesgo, Deshonesto, Falto de visión, Egoísta, Iluminado, Autoritario).
De ti depende seguir dirigiendo y liderando tu orquesta. Conseguir ser líder puede ser más o menos un camino fácil, lo importante es mantenerse en el camino.
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